LN Cap 14: Los Van Schafer

Yo: por qué hacen eso?

Jake: ellos son así, es que así se divierten

Yo: son amigos tuyos?

Jake: no… uno de ellos lo fue, pero luego se fue con el grupo de Sam, y ya no es el mismo… ha cambiado… Hey! Y qué hacías por aquí?

Yo: de hecho estaba dando un paseo y decidí visitarte

Jake: asombroso! Vamos que mi papá trajo carne… ohh bueno, si quieres puedo ver si hacemos una ensalada

Yo: eso suena bien, no tienen más pescado?

Jake: no, creo que mi papá me dijo que iba a salir a pescar mañana con Charlie

Yo: ahh ya veo..

Montamos su moto en mi pickup y conduje hasta su casa, durante todo el camino hablamos de lo típico, de cómo estaban nuestras familias, que había de nuevo, etc, siempre evitando el tema de los chicos de gimnasio que disfrutaban de tirarse a un acantilado

Yo: no tienes más nada que reparar?

Jake: de hecho sí, es un Jeep de hace 5 años, no conozco bien el modelo… pero debo arreglarle el motor y ponerle un parachoques nuevo

Yo: quieres que te ayude?

Jake: siempre

Siendo honesta, esta era la peor ensalada que he probado en mi vida, pero la comí como si me gustara, un par de bebidas y algo de postre, en la casa de Jacob nunca faltaba comida.

Después de esto nos fuimos a su garaje donde pasamos como unas 3 horas reparando el motor del Jeep, yo solo hacia lo que él me decía, incluido traerle agua, pero era divertido, porque estábamos juntos y la pasábamos bien. Ya me estaba acostumbrando a no usar tanto mis poderes, pero aún así no podía evitar hacer que se le desaparecieran las cosas a Jacob, o hacer que el auto le escupiera aceite, o que los limpiaparabrisas se encendieran solos, no me había divertido así en mucho tiempo.

Antes de que se hiciera muy tarde decidí volver a casa, cuando llegue vi extrañamente que Rae ya había llegado

Yo: qué haces aquí?

Rae: vivo aquí

Yo: qué haces aquí a esta hora?

Rae: es que… trate de decirle a Natasha, lo de mis poderes, pero no pude, me entró el pánico, y si le doy miedo?

Yo: si ella te quiere no creo que le des miedo

Rae: me va a odiar…

Yo: busca una forma creativa de decírselo, algo que haga que te quiera a pesar de lo que eres

Rae: como qué?

Yo: no sé, no sé qué es lo que le gusta a ella, además eso debes pensarlo tú

Rae: no me ayudas, hermana

Yo: suerte!

Subí a mi cuarto y agarré unos libros viejos que tenia sobre brebajes, buscando algo ahí que pudiera servirle a Grintt, había cosas sobre pociones para curar raíces que salían de los pies, el olor a Troll, regenerar miembros arrancados, hacer crecer el cabello, hacer crecer las uñas, curar una mordida de pixie, curar heridas provocadas por horwltomes… no sabía que existiera una cura para eso… Cuando llegué a la sección de “curar enfermedades” empecé a buscar “dragones” y había varias opciones, las anoté en un cuaderno aparte, arranqué la hoja y la guarde en mi bolsillo. Me puse ropa cómoda para dormir y me recosté en mi cama.

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Al día siguiente me despertó Rae lanzándome un vaso de agua a la cara, su venganza supongo. Y tal como el día de ayer, nos vestimos, tomamos nuestros almuerzos y salimos camino a nuestra antigua escuela, creo que esto se volverá costumbre, Rae se quedo hablando con Natasha, debo decir que se veía un poco nervioso. Suerte hermanito dije para mis adentros.

Ornella: Hey Swan

Yo: hey Ornella

Ya me estaba cansando esto de llamarnos por nuestro apellido

Ornella: puedes explicarme de qué hablan estos humanos todo el día?

Yo: te refieres a las clases?

Ornella: ni idea de lo que hablan, se complican demasiado y son aburridos… pero debo decir que sus matemáticas son demasiado fáciles

Yo: eso sí, pero no creo que pueda ayudarte mucho ahí

Ornella: diablos…!

Yo: pidele ayuda a Natasha, tengo entendido que ella es muy lista

Ornella: será…

Y así seguimos hablando, hoy ella parecía ser diferente, casi no traía nada negro, de un rojo sangre sí, pero al menos no era tan negro.

El día en la escuela fue casi tan aburrido como ayer, Rae ya tenía dos “amenazas” para que terminara su labor curricular. En los recreos hablé con Noah como siempre, ya había logrado que se uniera a mi reducido grupo de amigos, aunque Gianm seguía sin quererlo. Tuvimos que irnos a casa de Renee a pie, en el camino apareció Aria

Aria: primos! He visto algo rarísimo! Vengan a ver!!

Así era mi prima, ni un “buenas tardes” ni “hola” ni nada de eso, todo eso se omitía fácil, nos llevó hasta la frontera con el lado oscuro

Aria: cómo vas con la cura?

Yo: estoy en eso

Dijimos en susurros

Rae: para que nos trajiste aquí?

Aria: miren allá! Los Van Schafer tienen encendida la chimenea!

Efectivamente en la gran y lujosa mansión de los Van Schafer, la famosa y terrible familia de vampiros, tenia humo saliendo por su chimenea. Esto sí que era algo nuevo, ellos si son vampiros como en las películas de humanos, beben sangre, no salen a la luz del sol, no soportan el ajo etc etc, nunca había visto ni querido ver la luz, ninguna luz, por eso es extraño que esté encendida la chimenea, eso también significa que están activos, son como un volcán, siempre callados y calmados, pero luego empieza a salir un poco de humo para después hacer erupción. La última vez que paso esto fue hace mucho tiempo, en nuestro nacimiento, y no terminó muy bien. Una pareja… no, eran tres personas, si es que se le pueden llamar personas, salieron de la lujosa mansión hasta el borde de la frontera. No tuve problema en reconocerlos, eran Henrietta Van Schafer, una de las hijas del medio, junto con su hermana Nabel, la loca, y la pareja de ésta.

Henrietta: qué les trae por aquí hechiceros?